jueves, 19 de marzo de 2015

LOS DERECHOS Y OBLIGACIONES DEL HOMBRE Y LA MUJER EN EL ISLAM




Del libro: “Los derechos y obligaciones del hombre y la mujer en el Islam”
Sheij Rabee Al Madkhalee
Tarbiyyah Publishing
Capitulo 1, Parte 1: La condición de la gente antes del Islam y los derechos de las mujeres
Del hadiz de Iyyaadh ibn Himmar At Taweel ha llegado la declaración del Mensajero de Allah (salallahu aleihi wa salam) [sobre la gente de la época preislamica]:
“En efecto, yo he creado a todos mis siervos con una inclinación natural para Mi adoración, pero es el demonio quien viene a ellos y los lleva lejos de su religión. Ellos [los demonios] prohíben lo que se ha hecho permisible para ellos [los siervos de Allah], y les ordenan que asocien a otros conmigo. Mientras que no han recibido la revelación  que les ordene hacer eso. Ciertamente Allah miró a los habitantes de la tierra y detestó tanto a los árabes y los no-árabes, excepto aquellos que permanecieron de [entre] la gente del libro” [Sahih Muslim 2865, Ahmad 162/4]
En efecto, el Noble Qur’an ha mencionado varios ejemplos de la mujer pre-islámica y su comportamiento, así como de los paganos y de la gente del libro. A partir de estos ejemplos se puede ver la opresión que los árabes pre-islámicos ejercían hacia la mujer, y su menosprecio para con ellas, y el estado de depreciación entre ellos y la indignación hacia ellas, además de la insatisfacción [que sentía la mujer] consigo misma desde el momento de su nacimiento hasta [el momento en que la] muerte se apoderaba de ella.
“Y cuando a alguno de ellos se le anuncia el nacimiento de una hembra su rostro se ensombrece y tiene que contener la ira. Se esconde de la gente a causa del mal de lo que se le anunció pensando si se quedará con ello a pesar de la vergüenza o lo enterrará. ¿Acaso no es malo lo que juzgan?” [Surah de la  Abeja: 58-59]
Su estatus con respecto a otras naciones era aún peor. Ella no poseía ningún derecho familiar, y era vendida y comprada en los mercados. Durante la época romana, existía para los hombres un dominio absoluto, poseyendo los derechos completos sobre su familia; por lo que el hombre tenia la decisión final sobre su esposa y podía determinar [incluso] la muerte para ella por acusaciones mínimas. Del mismo modo él podía matar a su hijo o torturarlos sin ningún tipo de cuestionamiento.
La mujer de acuerdo a los Hindus, se encuentra en estado extrema de humillación y bajeza. [En ciertos casos] si su esposo muere, sobre ella recae [la obligación] de quemar su propio cuerpo cerca del lugar donde se encuentra el cuerpo del marido. En efecto, [según estos grupos hindus] ella debería estar complacida con este final, dado que la libera del maltrato y la humillación que ha experimentado.
De acuerdo a los judíos, ella es una maldición, porque ella engañó a Adam (alaihis salam). De acuerdo a ciertos grupos [de judíos], el padre tiene el derecho de venderla, y no puede sentarse al lado de ella ni [debe] comer con ella si ella menstrua, y ella no puede tocar ningún utensilio de alimento o bebida de tal forma que no lo “contamine”.
Por otro lado, los antiguos Cristianos, determinaron que el matrimonio era impuro y era obligatorio abstenerse de esto. Ellos también proclamaron que la mujer era la puerta para el demonio, por lo tanto una relación con ella era una abominación. [Esto fue afirmado por Agustine de Hippo (354-430 EC), Tomas de Aquino (1225-1274), Martin Lutero (1483-1586)].
En el año 586 de la era Cristiana; se celebró una conferencia para establecer si la mujer era o no humana, y si ella poseía o no alma, y si, en efecto, ella poseía alma, era esta un alma humana o animal en su naturaleza. Finalmente se determinó, en la conclusión de esta asamblea, que ella poseía alma humana y había sido creada solo para servir al hombre.
Las mujeres siguieron siendo subyugadas conforme a la ley Inglesa hasta aproximadamente la mitad del siglo pasado, donde ellas no contaban o no eran consideradas como individuos, ni como ciudadanas.
El Profesor Muhammad Rasheed Ridhaa dijo: “Desde las muy extrañas cosas que nos han llegado a través de algunos periódicos ingleses en los últimos tiempos, es que en algunas áreas rurales el hombre vende a su mujer por un precio extremadamente bajo, alrededor de los 30 chelines. […]
También, ha sido reportado de un investigador en América, que existen algunas personas que intercambian a sus esposas con otros por un periodo de tiempo (arreglado). Entonces [luego de ese tiempo] cada esposa regresa  con su respectivo esposo[…]
El Islam, por su parte, ciertamente ha elevado a la mujer de las profundidades de la bajeza y alejó de ellas la pesadilla de la opresión, y la oscuridad de la humillación y la exclusión, y afirmó para ellas una noble estatura y lugar, no otorgado por otras sociedades, sin importar, si es madre, hija, esposa o hermana.
Allah lo ha afirmado desde los siete cielos en Su declaración:
“¡Hombres! Os hemos creado a partir de un varón y de una hembra y os hemos hecho pueblos y tribus distintos para que os reconocierais unos a otros. Y en verdad que el más noble de vosotros ante Allah es el que más Le teme. Allah es Conocedor y está perfectamente informado” [Surah Al Hujaraat: 13]
Consecuentemente la mujer musulmana no esta en necesidad de mantener conferencias en orden de afirmar su humanidad y establecer  sus derechos, dado que para Allah y su Mensajero (la paz y las bendiciones sean con él) han afirmado esto para ellas y los musulmanes lo han garantizado.
Ellas tienen el derecho de la migración, la victoria y la protección por parte de los creyentes:
“¡Vosotros que creéis! Cuando vengan a vosotros las creyentes después de haber emigrado, comprobad su situación; Allah conoce su creencia, de manera que si verificáis que son creyentes no las devolváis a los incrédulos. Ellas no son lícitas para ellos ni ellos lo son para ellas.” [Surah Mumtahinah: 10]
Allah ha prohibido que alguien pueda hacer daño al creyente, hombre o mujer, sin razón alguna:
“Y los que ofenden a los creyentes y a las creyentes sin que lo que dicen sea cierto, habrán cargado con una calumnia y un delito indudable.” [Surah Ahzaab: 58]
Y Él ha prometido a quien atrae a los creyentes, sean hombres o mujeres,  lejos de su religión un castigo en el fuego del infierno:
“Los que pusieron a prueba con el tormento a los creyentes hombres y mujeres y no se volvieron en arrepentimiento, tendrán el castigo de Yahannam y tendrán el castigo del Hariq. ” [Surah Burooj: 10]
Allah ha comandado a Su Noble Mensajero (la paz y las bendiciones sean con él) de buscar el perdón para sí mismo, así como los hombres y las mujeres de entre los creyentes. Allah el Altísimo dice:
“Sabe que no hay dios sino Allah y pide perdón por tus faltas y por los creyentes y las creyentes.” [Surah Muhammad : 19]
Así que si el creyente (cuya percepción islámica está dañada), así como los opositores del Islam quieren saber algo de la situación de la mujer en el Islam, entonces vamos a dirigir su atención al funeral y la oración que se establece sobre ellas. Estos preparativos hará que los infieles y los hipócritas se maravillen; al ver como cientos de miles de adoradores en las dos sagradas mezquitas, están organizando y enderezando sus  filas en preparación para la oración fúnebre de una sola mujer creyente o bebé.
El Islam le ha dado esta distinción a la mujer creyente y esta distinción no es encontrada en otras religiones que han sido distorsionadas o han innovado [de la religión verdadera]. Siendo esto es inalcanzable por sus leyes no realistas, sin importar cuanto ellos clamen el honor de la mujer.
Más bien, el actual movimiento que está siendo impulsado por los judíos y los cristianos, de hecho, ha tergiversado la mujer de una manera vergonzosa, ya que la retrata como una mercancía barata y un juguete para los hombres, en el lugar de trabajo, así como en los mercados, tiendas de ropa, revistas y periódicos. ¿Cuántas veces hemos sido testigos de las degradantes fotografías de mujeres en las revistas ? Estas imágenes deshonran a las mujeres y preocupan a los que son lascivos, y que encuentran placer en estas representaciones vergonzosas y degradantes. Tal vez las estadísticas no han podido detectar la ocurrencia de embarazos no deseados e ilícitos [a raíz de esto]. Todo esto es el resultado de leyes que claman un trato más equitativo a la mujer y que [claman] haberles dados derechos entre las cuales incluyen libertad e igualdad.
Todo esto es el directo resultado de los medios [de comunicación] modernos ofensivos, que son fomentados y reforzados por las leyes y los sistemas legislativos [no islámicos]. Siendo estos mismos sistemas [los que] se oponen a la legislación de Allah, el Creador Omnisapiente. Es Allah quien ha dado a los hombres y las mujeres sus respectivos derechos al honor, la justicia y la equidad en el camino del Libro de Allah y la Sunnah, a través del Islam.
Estos son los sistemas legislativos y leyes que son usadas [también] por los insensatos inmorales [que aparentan] “como musulmanes”, como los orientalistas, los liberalistas, y los desinhibidos legisladores en las tierras musulmanes, quienes desean subyugar a las mujeres musulmanas a la profundidad de su destructivo lodazal.
Ciertamente, el Islam le ha dado tanto al hombre como a la mujer sus respectivos derechos con justicia y preciso balance. El Islam ha legislado para los hombres derechos y obligaciones, los cuales son adecuados para su hombría; fuerza, intelecto, la habilidad de enfrentar el peligro,  soportar la calamidad, pruebas, y la inherente naturaleza que Allah le ha ofrecido.
El Islam  ha legislado para la mujer derechos y obligaciones los cuales son adecuados para su femineidad; su debilidad relacionada con el hombre en términos de fuerza física), como su posición más débil para enfrentar el peligro o calamidad.
Los musulmanes, hombres y mujeres de igual manera están complacidos con la divina legislación [de Allah], la cual es sabia y misericordiosa y es considerada de los asuntos que ellos aceptan de buena manera. [Pero] quien se libera de esto, entonces no es creyente, al considerar [que puede] corregir a Allah y a su Mensajero. Que Allah prohíba tal cosa a una persona que cree en Allah, en su Enviado y en sus Libros.
El Islam ha sido cuidadoso considerando y respetando las diferencias y estableciendo en base a esto derechos y obligaciones tanto para los hombres como para las mujeres, respectivamente, después de los derechos de Allah sobre cada uno de ellos. De los derechos de Allah sobre sus sirvientes, hombres y mujeres por igual, es que ellos adoran a Allah sin asociar nada en la adoración a Él y el establecer los conocidos pilares  del Islam y el Imaan. También deben establecer un trato amable a sus padres y mantener los lazos familiares. Además, deben ordenar el bien, prohibir el mal, y realizar los deberes, los cuales son compartidos por los hombres y las mujeres.
Traducido del Ingles al Español por Hassan ‘Isa

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