lunes, 8 de marzo de 2010

Historia de un hermano...

As Salamu Aleykum.
Les copio la historia que encontre, sobre un hermano musulman, la cual me impresiono mucho, creo que es buena conocerla.

Hice la Shahada hace un año y medio, hacía ya un tiempo que leía algunas cosas de Islam (unos 3 años) y la idea del Tawhid resonaba dentro de mí con mucha fuerza, me identificaba con ello. Soy un musulmán catalán de un pueblo cercano a Barcelona, siempre me había interesado el sufismo y tenía libros de Rumi, Ibn Arabi, etc….. (más que libros pequeñas compilaciones de esas que puedes comprar en tiendas de esas hippies, libros de poesía sufí, etc..).

Un día me dirigí a una mezquita, la que estaba más cerca de mi casa, hablé con un hermano que había en la entrada y le dije :”oye que soy español y quiero decir la Shahada”, el me dijo :”ahhh bien espera llamamos al Imam”.

Apareció entre la gente un tipo joven vestido todo de blanco, con una barba muy poblada, negra y muy apretada y rizosa. Era el Imam, se llamaba Said, era marroquí y tenía una cara como resplandeciente, muy risueña, unos grandes dientes blancos y un aspecto impecable.

En fin un tipo de esos que impresiona y que piensas que debe ser alguien importante, o debe ser una especie de santo o un gurú o algo así (era mi primer contacto con musulmanes dentro de un masjid, pues los que conocía hasta entonces eran los pakistaníes de las tiendas del vale-todo-todo-se-vende).

Una vez dicha la Shahada empecé a ir al Masjid, a conocer gente y los hermanos, pues empezaron a dejarme libros.

La mayoría de libros que me dejaban, eran pequeñas ediciones de cómo hacer el salat, cómo hacer el wudu, etc…..

El Imam said había estudiado 6 años en Arabia Saudi y todos los libros que me dejaban eran de sabios de Arabia saudí, al cabo de una semana me regalaron el Corán en árabe y castellano con tafsir del Imam Qurtubi.

Así transcurrió medio año, fue una etapa perfecta, muy feliz, me sentía muy satisfecho y tenía dentro de mí una gran sensación de paz y tranquilidad. Los primeros meses apabullaba todos los días al Imam Said a preguntas (esto de puede hacer?, esto es válido?...etc…), pero poco después el me fue regalando libros más grandes y completos; el primer libro que tuve de grandes dimensiones fue la Aqidah Wasitiyyah del Imam Ibn Taymiyyah, un libro realmente denso y pesado de leer (no esperaba nunca que hubiese cosas tan complicadas en el Islam, pues siempre pensé que era una religión fácil).

El segundo gran libro que me regalaron era, sifat salat an nabi del Imam Muhammad Nasirudeen al Albani. Como digo, todo era perfecto, pero yo hechaba de menos una cosa en todo lo que aprendía, el sufismo, que antes de hacerme musulmán tanto había deseado aprender.
Así empecé a preguntar a los hermanos, sobre el sufismo, pero la mayoría de ellos de decía que eso no era Islam, y que era una secta desviada.

Finalmente un día tuve una larga charla con el Imam Said, sobre el sufismo, que no me convenció porque según él el problema de los sufís no era la intención (que era buena) sinó la elaboración de un conjunto de teorías que estaban claramente fuera del Islam, aquí empezaron las cosas del Biddah y el Shirk y todo eso.

Cada vez estaba más insatisfecho con las explicaciones que me daban, ya que siempre decían:
“No hay grupos en el Islam, sólo hay el Corán y la Sunnah sahiha y nada más, todo lo demás son cosas que se han ido añadiendo y añadiendo pero que nada tienen que ver con las creencias a las que Rasulullah saws nos enseñó como obligadas, ni las primeras generaciones de musulmanes”.
Sea como sea, finalmente contacté con unos hemanos sufís en Barcelon, en el barrio de Gracia.
Lo que más me chocó al entrar a su mezquita (a la que llamaban dergah), era la cantidad de hornamentaciones, cuadros, rosarios, cojines, y la foto de un hombre mayor con barba blanca y turbante en las paredes, etc……era todo como muy recargado……justo al revés de la mezquita del Imam said, donde sólo había paredes blancas, suelo marrón, una especie de silla en el minbar y un reloj digital en la pared con las horas de la oración.

Uno era austero y el otro era como barroco.
La mayoría de gente era española (90%) conversos como yo, y hasta podía hablar catalán con ellos cosa que me hizo sentir más en familia. Empecé a asistir a los Dikr-Allah, y me gustaban mucho, era curioso porque allí estábamos todos, mujeres y hombres mezclados y muchas de las chicas que allí acudían iban sin hijab y al entrar nos dábamos todos 2 besos en la cara, cosa que todavía me hacía sentir más cómodo (más normal por así decirlo).

Allí expliqué que era musulmán hacia poco más de medio año y me fije que rezaban el salat bastante diferente que yo, tb empecé a apabullar a preguntas al sheikh local de allí y allí aprendí por primera vez que significaba un madhab (hanafi) y una tarikat de sufismo.

La verdad es que poco tiempo después empecé a ver cosas que no me cuadraban, por ejemplo cuando se organizó un viaje para ver al sheikh, me preguntaron si quería ir, y dije que no podía, pero después dije que si que quería ir porque el sheikh era muy mayor y me haría ilusión ver a un sheikh de sufismo en vivo………mi error fue decir eso en alto, porque me respodieron una cosa que me chocó mucho: “El sheikh es muy mayor, pero vivirá hasta que él mismo decida que quiere vivir y ya tiene planeada su muerte y no es ahora”.

La verdad es que no lo entendí, pero lo dejé correr.
No tardaron en aparecer otras cosas relacionadas con el sheikh, y lo que pasaría cuando muriese (que vendría una figura escatológica llamada imam Mahdi) y que así había sido previsto y que se trataba de ir avisando a la gente antes de que eso aconteciera y se produjese un desastre natural. Según ellos el Imam mahdi estaba vivo y se había comunicado con el sheikh, que hacía eso mismo que hacíamos nosotros los jueves Dikr-Allah, con él en una dimensión oculta.

Eso todavía me cuadraba menos, porque el sheikh no era sirio decían que el Imam Mahdi ya estaba en la zona de Siria pero oculto……Así que al preguntar me dijeron que el sheikh tenía la habilidad de estar en varios lugares al mismo sitio.

O sea podía estar haciendo Dikr en su casa, pero a la vez estar en Siria con el Imam Mahdi y en Makkah haciendo en hajj. He de decir que cada vez que preguntaba más cosas de esas, el sheikh local se ponía nervioso y me contestaba pero a regañadientes.

Un día le dije que me diese un dalil del Quran y la Sunnah de eso que me decía y ese día ya se enfadó mucho más, me dijo que tenía influencias wahhabi. Yo no sabía que era ser una persona de influencia wahhabi. (pero pensé que quería decir algo así como descreído, o racionalista, etc….).

Así que al final los Dikr se transformaban en discusiones……lamentablemente.
Un día fui a una mezquita del raval, en Barcelona, era un salat un Asr y a mi lado había otro español, empezamos a hablar después de salir del masjid y me dijo que él era sufí y de madhab maliki, me explicó la tarikat en la que estaba y yo pues le explique lo que me estaba pasando:
El me dijo: “sabes el sufismo es una parte irrenunciable del Islam, pero tu has tenido la mala suerte de ir a parar a una tarikat que es de desviados, es gente batini (esotérica), que descuida la sharia y además es una tarikat muy cuestionada y criticada por los mismos sufís”.

Nos dimos los teléfonos y quedamos otro día, el hermano me facilitó libros del madhab maliki (la Risala del Imam Al Qairawani) y fui con él y otros hermanos a su Dikr, en otra dergah.
Esta era diferente que la de primera que había conocido, se parecía mucho más al masjid del Imam Said y la mayoría de hermanos no eran catalanes sinó negros, concretamente senegaleses y gambianos.

La verdad es que el Dikr se parecía mucho, pero esta vez no había mujeres con nosotros.
Hacían mucho énfasis en el madhab maliki y el Amal de madinah, y yo empecé a estudiarlo, esos hermanos eran muy simpáticos y muy divertidos. Me preguntaban a menudo lo que hacíamos en la otra tarikat, y entre ellos se reían a carcajadas cuando les contaba las cosas que me habían dicho en la otra dergah. Allí pasé un par de mese bastante buenos, hasta que un día un el Sheikh me preguntó si quería formar parte de esa tarikat y dije que si, pero antes de dejarme entrar el sheikh me dijo:

Debes saber algunas cosas:
1-esta no es una tarikat cualquiera, una vez entres no podrás salir.
2- Si entras no podrás hacer tawwasul a través de los Awliyyah fallecidos de otras turuq, pues nuestro fundador fue el Khatam ul Awliyyah (el sello de los santos) y debemos respeto a nuestro sheikh fundador, y debes saber que los sufís anteriores con los que estabas son desviados por muchas cosas, pero la más grave es esta, no aceptar el khatam ul awliyyah, es más dicen que era otro.

3- Si entras te serán explicados unos secretos de Aqidah, pero que no podrás revelar a nadie y si los revelas, es como si hubieses salido y si sales harás algo haram.
No cabe decir que me asusté bastante, por las palabras del sheikh y le dije…..bueno pues de momento no, gracias.

Una vez en el tren con el hermano español, le pregunté acerca de todas esas cosas del khatam ul Awliyyah, etc….. Él me dijo que era verdad, y que lo de que no se podía salir era verdad.
Tuve pesadillas esa noche, no me sentía bien y esa sensación duró un largo tiempo…….me daba la sensación de haber entrado en una secta. Me fui distanciando de ellos, poco a poco, incluso dejé de hacer la mayoría de los salat, y estaba desanimado, triste y desorientado.

Un día iba por la calle y un chico negro repartía unas tarjetas, donde ponía que el guru sheikh bamba no sé que, te quitaba los demonios que llebavas dentro si le llamabas por teléfono a un número y le ibas a visitar a su casa, asimismo prometía darte una potencia sexual sin igual y quitarte el mal de ojo.

Me hizo gracia el papelito y lo llevé a la Dergah de los hermanos y se lo enseñé al sheikh, pero lo curioso es que me dijo: “eso es verdad, son unos poderes derivados del sufismo, que permiten hacer esas cosas. Yo puedo si quieres, concertarte una cita en Senegal con un sheikh y si le das 300 euros el puede buscarte una mujer rubia y un buen trabajo en europa a través de los poderes de tassawwuf”.

Eso es lo que más me asustó de todo, y jamás volví allí. Dejé prácticamente la práctica de la religión……hasta que un día en el Raval (al lado de la Paloma), entré en una mezquita de pakistaníes, allí hice el salat, vi a varios españoles alrededor de un Imam pakistaní ataviado con un turbante negro y unas barbas larguísimas, me senté con ellos, y escuche lo que explicaban.
Al salir hablé con los hermanos españoles, fuimos a cenar juntos y se interesaron por mí.
Les explique todas mis aventuras y me dijeron:

“Mira el sufismo es parte del Islam, pero hoy en día es mejor dejarlo de lado, porque los sufís han incurrido en más biddahs que no sunnahs, no obstante nosotros somos sufís”.
Todos los pakistaníes de esa mezquita hacían cara como de enfadados todo el rato, como de serios y preocupados por algo muy grave que yo no entendía y todos lucían turbantes negros o blancos y unas largas barbas, pero sintonicé rápidamente con uno de ellos, me hice amigo y empezamos a hablar.

Al cabo de no mucho tiempo me explicaron que ellos eran Deobandis, musulmanes hanafis y sufís, a favor del jihad mundial contra el poder del kuffar y contra las biddah que se hacían en nombre del sufismo, poco a poco me di cuenta que era una mezquita pro-talibanes.
Un día pregunté al Imam acerca de las prácticas de los Talibanes en Afghanistan, contra las mujeres, los shias, etc…..Y me respondía vagamente, como si no quisiera posicionarse, finalmente un día hablando de los shias (las matanzas que los talibanes hacían), me dijo:
“Quien la hace ……debe pagar”.

Ese día me di cuenta que ese lugar no era para mí.
Así pasé en una profunda desorientación un par de meses (incluso pensé en dejar el Islam)…..pero…………………………………pero un día esperando en un semáforo, vi a un marroquí que se me acercaba y me decía: “Assalamu aleikum akhi como estás?”, era un musulmán de los del masjid………. del Imam Said, lo que llevaba una larga barba y no le reconocí.
Fuimos a tomar un café y me dijo, porque no vienes al Masjid un dia akhi? La verdad es que te hechamos de menos……

Esperé un par de días y volví al Masjid, hice las abluciones y allí estaba sentado delante de una multitud de gente, el Imam Said, como siempre vestido todo de blanco, con un topi blanco y un aspecto imponente…..un aspecto sereno y relajado y con la pinta de santón de siempre, leyendo un libro en árabe a la audiencia que allí estaba congregada.

Después dirigió el salat, volví a rezar como había aprendido en los libros del Imam Albani, poco a poco, con todos los hermanos y después del salat, me sentí otra vez en casa.

El Imam Said, me preguntó y le explique todas mis aventuras por esos mundos de Dios, pero no rió, ni hizo ningún gesto mientras yo le iba explicando, ni aprobaba ni suspendía nada, sólo escuchaba con los ojos fijos en los míos (tanto que a veces yo los bajaba).

Al finalizar toda mi explicación, me dio una palmada en la espalda, sonrió y me dijo:
“No pasa nada por todo eso que te ha pasado akhi…….eso es normal…..mira te acuerdas lo que te explique de los grupos? Te acuerdas de lo que te explique de la Aqidah?.......querido akhi, céntrate en aprender el TAWHID, establece el salat, vete poco a poco, y recuerda que sólo hay dos cosas que debes obedecer Allah swt y su mensajero saws y todo lo demás son opiniones que podemos dejar en la cuneta sin ningún problema, a partir de ahora akhi pide a todas las personas un Dalil que no es más que Allah swt dice…..(en una ayat del Quran), pero sin interpretaciones o Rasulullah saws dice……..(en un hadith sahih) y todo lo que no esté allí pero literalmente ya te digo que lo puedes tirar a la cuneta”.

Entonces entendí que el Imam said era lo que llaman un salafi.
No he visto persona más humana y piadosa que este ser humano que Allah ha puesto en mi camino……más tranquila, relajada, amable y con un adab más bueno.

Yo Alhamdulillah he encontrado mi casa espiritual que es el Islam, pero bajo el entendimiento de los salafus salih, porque todo lo demás (y me he esforzado mucho por ser otras cosas), no me cuadra, lo veo creador de división, de discusión y lo veo una manera incrible de perder el tiempo y desorientar a la gente.

Un día leí un artículo de Abdennur prado, donde explicaba que el salafismo está en auge y que es como una especie de moda. No estoy de acuerdo, pero si que creo que en un momento de tantas confusiones, la vía de los salaf, propone simplicidad, racionalidad y vuelta al Corán y la Sunnah que son la base de nuestra religión.

Creo de verdad que cuanto más insistan los sufís en esas cosas tan extrañas (para mí), más y más se irán engrosando las filas de la Dawah salafiyyah. Muchas gracias a todos.

As Salamu Aleykum

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